Buscar y encontrar

Aquí la tierra se funde con mis manos

jueves, 22 de noviembre de 2018

La historia hélice




La historia hélice

Si ustedes se fijan bien, de acuerdo con el pronóstico del tiempo por ejemplo, y con los libros de historia que se estudian en colegios y academias, pero también de acuerdo a la adivinación, la quiromancia y la tómbola y las frecuentes cábalas de la suerte, al tarot y la magia blanca;  incluso de acuerdo con los análisis económicos, sociales, con las estadísticas y tantas otras cosas por el estilo, la historia personal del individuo o la vida social general --pasado, presente y porvenir-- se presentan por lo corriente de una manera lineal, continua. Es decir que para casi toda la mayoría de ustedes la vida y la historia es un asunto recto. Podríamos definirla con una raya  de tiempo en este pizarrón. Así. Pero la percepción de ese suceder de hitos llamado también el devenir puede en ocasiones estudiarse tal una proyección helicoidal, es decir, como un sacacorchos, un caracol o un espiral para los mosquitos, donde los hechos primeros suceden en uno de los extremos y la vida personal o social se desarrollan, a continuación, de una forma curvilínea. ¿Han visto, se han fijado alguna vez en una escalera caracol?: Fíjense para la próxima clase y describan cómo es que desde un peldaño podemos ver hacia arriba y hacia abajo un par similares en orientación y posición.  Es decir de esta otra forma que diagramo aquí a la derecha. Con esto quiero expresar que si bien cada hecho es único e irrepetible tiene cierta resonancia en otro punto de la historia. Cada hecho particular es un tanto volver a reincidir en otros hechos particulares del pasado, o del futuro previsible. No estoy diciendo que creo en las supuestas diferentes vidas ni en la reencarnación sucesiva de cada individuo y karma. Tampoco pretendo enseñarles una historia meramente circular y de eterno retorno. El programa es un poco más complejo que eso. Se trata más bien de hechos puntuales, pero que llevan cierta similitud o parentesco con otros tipos de acontecimientos, más lejos o más cerca de su punto histórico; quizá en otro plano, sí, pero análogos en cierto sentido. Si la historia fuera simplemente lineal no se podría explicar determinados hechos reiterativos; si dicha misma historia fuera meramente círculo, no entenderíamos la originalidad y el genio: no avanzaría la historia. Por eso proponemos un esquema mixto, un esquema hélice. Como bien expresa esta figura de la derecha.