La moneda
Busco
un centavo que perdí cuando esperaba el tren de la hora. Debe estar
brillando en el andén, refulgiendo el sol como una chispa incandescente,
haciendo reflejar una porción de cielo cual si fuera una gota de agua o
saliva.
¿Por qué dejé ir ese tren? ¡Acaso no vale más que el centavo que extravié!... Y sin embargo, sigo buscando mi centavo.
¿Por qué dejé ir ese tren? ¡Acaso no vale más que el centavo que extravié!... Y sin embargo, sigo buscando mi centavo.
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